miércoles, 1 de octubre de 2014

La segunda generación


En 1958 comienza la segunda generación, cuyas máquinas empleaban circuitos transistorizados. El transistor es un elemento electrónico, que permite reemplazar al tubo, con las siguientes ventajas:
  • su consumo de corriente es mucho menor, con lo que también es menor su producción de calor.
  • Su tamaño es también mucho menor. Un transistor puede tener el tamaño de una lenteja mientras que un tubo de vacío tiene un tamaño mayor que el de un cartucho de escopeta de caza. Esto permite una drástica reducción de tamaño. Mientras que las tensiones de alimentación de los tubos estaban alrededor de los 300 voltios, las de los transistores vienen a ser de 10 voltios, con lo que los demás elementos de circuito también pueden ser de menor tamaño, al tener que disipar y soportar tensiones mucho menores.
  • El transistor es un elemento constituido fundamentalmente por silicio o germanio. Su vida media, es prácticamente ilimitada, y en cualquier caso, muy superior a la del tubo de vacío.
    Como podemos, ver el simple hecho de pasar del tubo de vacío al transistor, supone un gran paso, en cuanto a reducción de tamaño y consumo y aumento de fiabilidad. Las máquinas de la segunda generación emplean además algunas técnicas avanzadas no sólo en cuanto a electrónica sino en cuanto a informática y proceso de datos como por ejemplo los lenguajes de alto nivel.